Marzo ya está aquí. Y ¿Quién no necesita un período de adaptación para pasar de unas idílicas vacaciones a las carpetas de oficina? Si eres de las que se deja arrastrar por la nostalgia del verano, anota estos consejos para no dejarte ganar y disfrutar del otoño plenamente.
- Busca un reto: no tener un plan o expectativa a corto plazo resulta fatal para tu estado anímico. Busca cosas sencillas que puedas hacer (limpiar la bodega, empezar a dejar de fumar, aprender crochet…) y que te proporcionen victorias regulares que te hagan sentir mejor.
- Cambia tu entorno: no tiene que ser un cambio radical, pero modificar ligeramente la decoración de tu hogar te ayuda a renovar tus ilusiones. Cambia de lugar los muebles, prueba a cambiar el color de las cortinas, compra flores…
- Compra con cabeza: los carteles de “nueva colección” llevan ya unas semanas en las tiendas pero antes de lanzarte a llenar tu clóset de tendencias que no llegarán al invierno, revisa tu ropa a conciencia y busca esa prenda o complemento especial que realmente te hace falta y que sabes te acompañará durante muchos años. Invertir en un buen abrigo, un par de botas o una cartera buena merece la pena.
- Engánchate: el otoño nos trae las nuevas temporadas de nuestras series preferidas y también otras nuevas. Pero como no sólo vivimos de la televisión, las editoriales también publican los libros que consideran apuestas seguras. Ambas cosas te ayudarán a evadirte de los pensamientos negativos.
- Refresca tu imagen: de forma radical o apenas perceptible. Apuesta por un nuevo corte de pelo, invierte en una prenda diferente con la que nunca te hayas atrevido o sencillamente píntate los labios de rojo. Verse bien nunca falla.